Este nuevo disco pesa solo 59 gramos y está especialmente diseñado para su integración en dispositivos móviles como por ejemplo los actuales reproductores multimedia portátiles, cámaras de fotos o incluso ordenadores portátiles. Así con esta capacidad es posible almacenar más de 30.000 canciones o más de 100 películas.
Este record en la de capacidad almacenamiento ha sido posible gracias al aumento de la densidad de grabación que en este nuevo disco alcanza los 353 mega-bit por milímetro cuadrado.
Al mismo tiempo, la compañía ha mejorado la velocidad de lectura y escritura, su menor consumo energético y una mayor densidad para la grabación de datos. Para ello estos discos integran una nueva interface CE-ATA que optimiza su rendimiento en dispositivos electrónicos ofreciendo una velocidad de transferencia de hasta 52 MB por segundo.
Además en estos discos se ha cuidado la eficiencia energética y sólo consumen 0,002W por GB, un 33% menos que los modelos anteriores de Toshiba en este formato. Este bajo consumo energético resulta una gran ventaja, ya que permite aumentar la autonomía de los dispositivos en los que se puede integrar.
Para Pablo Romero (en la foto), director de marketing de Toshiba, “El mercado de los discos duros de pequeño formato está creciendo muy rápido debido al desarrollo de un gran número de aplicaciones dentro de la informática y la electrónica de consumo. Cámaras digitales, reproductores multimedia portátiles, o portátiles ultraligeros son algunas de sus aplicaciones y en ellos los usuarios buscan siempre mayor capacidad de almacenamiento, pero sin renunciar a la ergonomía, el peso o la autonomía. Nuestro nuevo disco es pequeño, ligero y con una capacidad increíble”.
Este record en la de capacidad almacenamiento ha sido posible gracias al aumento de la densidad de grabación que en este nuevo disco alcanza los 353 mega-bit por milímetro cuadrado.
Al mismo tiempo, la compañía ha mejorado la velocidad de lectura y escritura, su menor consumo energético y una mayor densidad para la grabación de datos. Para ello estos discos integran una nueva interface CE-ATA que optimiza su rendimiento en dispositivos electrónicos ofreciendo una velocidad de transferencia de hasta 52 MB por segundo.
Además en estos discos se ha cuidado la eficiencia energética y sólo consumen 0,002W por GB, un 33% menos que los modelos anteriores de Toshiba en este formato. Este bajo consumo energético resulta una gran ventaja, ya que permite aumentar la autonomía de los dispositivos en los que se puede integrar.
Para Pablo Romero (en la foto), director de marketing de Toshiba, “El mercado de los discos duros de pequeño formato está creciendo muy rápido debido al desarrollo de un gran número de aplicaciones dentro de la informática y la electrónica de consumo. Cámaras digitales, reproductores multimedia portátiles, o portátiles ultraligeros son algunas de sus aplicaciones y en ellos los usuarios buscan siempre mayor capacidad de almacenamiento, pero sin renunciar a la ergonomía, el peso o la autonomía. Nuestro nuevo disco es pequeño, ligero y con una capacidad increíble”.
