Según un estudio realizado por Panda Security, más de la mitad de los adolescentes españoles entre 15 y 18 años utiliza diariamente Internet, pasando una media de 17,5 horas semanales conectados.
La actividad que realizan en la red está orientada en un 30%, a asuntos relacionados con sus estudios, y un 70% lo dedican a actividades de ocio, como jugar online, ver vídeos, escuchar música, mantener conversaciones, etc. Mientras que el 61% de los padres declara sentirse preocupado por la seguridad online de sus hijos, enfocada a las amenazas a las que pueda exponerse (contacto con desconocidos, acceso a páginas con contenidos inapropiados, etc.), ninguno señala entre sus principales preocupaciones el riesgo de que su hijo pueda estar realizando actividades ilícitas en Internet.
Sin embargo, el 70% de los jóvenes encuestados afirma haber intentado hackear, en alguna ocasión, cuentas de mensajería instantánea, redes sociales, etc., de sus conocidos. Asimismo, el 23% confirma haber reenviado fotos comprometidas de compañeros por Internet o haberlas publicado en espacios web sin consentimiento previo. Del universo consultado, se ha detectado un perfil de usuarios adolescentes con conocimientos técnicos avanzados que admite tener capacidad para encontrar herramientas de hacking en Internet (un 16%). De éstos, el 30% confirma haberlas utilizado en alguna ocasión. Preguntados por la razón, el 89% dice que la curiosidad y el afán de aprendizaje les movió a investigar este tipo de herramientas públicas.