Acaba de llegar a Xbox ONE y PS4 y supone un viento fresco sobre el Videojuego. Yo dejo a un lado críticas sobre aspectos innecesariamente destacables para quedarme con el impacto en el jugador. Bienvenidos a la Edad de Piedra.

Sabes que NO me gusta destripar tramas ni trucos o vivencias que sí puedes encontrar en la RED, si quieres o lo precisas. Pero te voy a adelantar cuestiones, claro. Me gusta cómo después de cada guardado, cuando vuelves al juego se hace un resumen breve y secuencial que te sitúa perfectamente. Me gusta también cómo el idioma, no choca. El subtítulo, tampoco. La mecánica del juego te será revelada fácilmente, y poco a poco; no desesperes. La mecánica de la exploración y la utilización del mapa, imprescindible.

Podrás ver, domar y luchar contra todo tipo de carnívoros como los Smilodon (tigres dientes de sable), osos cavernarios y lobos, y también herbívoros gigantes como los mamuts, los rinocerontes lanudos y los Megaloceros. En total, en el juego tenemos alrededor de cincuenta especies diferentes de animales, algunos de los cuales todavía existen en la actualidad o no han evolucionado mucho.
Se nota el trabajo y aportación de historiadores, antropólogos, lingüistas y cineastas para completar un Videojuego propio de lo que yo denomino Octavo Arte. Enhorabuena.