Y esto ocurre tras tocar fondo en 2013 después de 12 años de caída continuada, y se apunta en el ejercicio recién concluido un repunte del 6,85%.
Son datos de PROMUSICAE.
Los españoles se gastaron a lo largo de 2015 un total de 160,2 millones de euros, un estirón apreciable respecto a los 149,9 millones del año anterior pero muy lejos de aquellos 603 millones acreditados en 2001, el año a partir del cual las descargas ilegales y la crisis condenaron al sector a doce temporadas consecutivas de caída libre.
El auge de los formatos digitales, en particular gracias al éxito del streaming, explica el crecimiento en un año en que las ventas físicas siguieron desinflándose, según las estadísticas que ha hecho hoy públicas Promusicae, la asociación que engloba a más del 90% del sector discográfico español.
Mientras, las descargas de canciones, álbumes o vídeos representan el 16% de la tarta digital (12,7 millones). Los productos específicos para móviles, como los tonos o los llamados ringbacktones (canciones para amenizar la espera hasta que se descuelga la llamada) se reservan el modesto 2% restante (1,7 millones).
Por primera vez desde 2010, el disco más vendido en España no corresponde al malagueño Pablo Alborán que encabezó esta clasificación durante cuatro temporadas consecutivas. Alejandro Sanz, con su Sirope, se coloca como número 1 en la lista de álbumes, y se convierte en el disco más vendido del año, superando los 155.000 ejemplares.
En realidad, Alborán, flamante ganador del Goya 2016 a la mejor canción por Palmeras en la nieve, conserva el segundo puesto (120.000 unidades) con Terral, el álbum más vendido del curso anterior, y además suma otras 15.000 unidades con Tour Terral: Tres noches en Las Ventas, líder en la categoría de DVD, donde deja muy atrás a los dominadores absolutos de ese segmento durante el último lustro: las diferentes entregas de la colección infantil Cantajuego.
tras tocar fondo en 2013 después de 12 años de caída continuada, y se apunta en el ejercicio recién concluido un repunte del 6,85%. Los españoles se gastaron a lo largo de 2015 un total de 160,2 millones de euros, un estirón apreciable respecto a los 149,9 millones del año anterior pero muy lejos de aquellos 603 millones acreditados en 2001, el año a partir del cual las descargas ilegales y la crisis condenaron al sector a doce temporadas consecutivas de caída libre. El auge de los formatos digitales, en particular gracias al éxito del streaming, explica el crecimiento en un año en que las ventas físicas siguieron desinflándose, según las estadísticas que ha hecho hoy públicas Promusicae, la asociación que engloba a más del 90% del sector discográfico español.