Se trata del primer lanzamiento de un astronauta de la ESA a bordo de una versión perfeccionada del cohete insignia ruso, que lleva casi 50 años en servicio. A pesar de las mejoras, para los tres astronautas ha sido como pasar dos días en un pequeño automóvil. A lo largo del viaje, el trío mantuvo el contacto por radio con el control de tierra en Moscú.
Tras el acoplamiento efectuado a las 21:58 GMT, Thomas, Peggy y Oleg fueron recibidos en la Estación Espacial a las 00:40 GMT por el astronauta de la NASA Shane Kimbrough y los cosmonautas Andrei Borisenko y Sergei Ryzhikov.
Los seis se ocuparán del mantenimiento de la estación y llevarán a cabo experimentos científicos que no pueden realizarse en ningún otro lugar, aprovechando las condiciones de ingravidez únicas de este laboratorio espacial.